martes, 27 de abril de 2010

QUÉ HACER AL SUFRIR UN ATAQUE DE PÁNICO

Cuando se han descartado enfermedades de tipo orgánico (trastornos endocrinos, circulatorios, dificultades de tensión arterial…) debemos seguir una serie de pasos para prevenir y superar los ataques de pánico.

- Tomar medidas de salud apropiadas: dormir bien, llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio, divertirse y cambiar hábitos que puedan perjudicarnos.
- No caer en el rol del enfermo. Hay que seguir llevando una vida normal. La ansiedad es algo interno y no debemos culpar al mundo que nos rodea de lo que nos está sucediendo. Las circunstancias no desencadenan los ataques de ansiedad.
- No anticipar pensamientos negativos relacionados con la ansiedad. Cuando más pensamos en un posible ataque de ansiedad más nos estamos predisponiendo a padecer uno. Estamos en estado de alerta y cualquier estimulo neutro puede percibirse como negativo.
- Entender la ansiedad. La ansiedad es miedo y el miedo no nos hará morir ni volvernos locos.
- Centrar la atención en otra cosa, distraerse.
- Aprender técnicas de relajación y respiración.
- Nunca dejar de hacer lo que estamos haciendo. No huir del lugar en el que estamos. Hay que enfrentarse a ello. No nos va a pasar nada.
-No enfadarse con uno mismo ni culparse de ello. La culpa y el enfado pueden llegar a deprimirnos al no aceptarnos a nosotros mismos.
- Pedir ayuda. No nos hace débiles necesitar ayuda. Al tener una enfermedad física acudimos al doctor y no nos sentimos mal por ello.
Él psicólogo te va a ayudar a seguir las pautas necesarias para superar la ansiedad.
No debemos llegar al extremo de poner en peligro nuestra calidad de vida cuando sabemos que la ansiedad es un problema, desgraciadamente, cada vez más común, y que tiene solución si uno realmente quiere y se deja ayudar.

SÍNTOMAS DEL ATAQUE DE PÁNICO O CRISIS DE ANSIEDAD

El síndrome de ataque de pánico se define como un episodio de miedo intenso o molestia, durante el cual aparecen bruscamente cuatro de los siguientes síntomas:

- palpitaciones, golpeo de corazón o ritmo cardíaco acelerado
- sudoración
- temblor o sacudidas musculares
- sensación de respiración dificultosa o ahogo, sensación de asfixia
- dolor o molestias en el pecho
- náuseas o malestar abdominal
- sensación de vértigo, inestabilidad, mareo o pérdida de conciencia
- desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización(sentirse separado de si mismo)
- miedo a perder el control o volverse loco
- miedo a morir
- parestesias (sensaciones de adormecimiento o cosquilleo)
- ráfagas de frío o calor

domingo, 25 de abril de 2010

TIPOS DE ANSIEDAD

  • TRASTORNO DE PÁNICO CON O SIN AGORAFOBIA
  • AGORAFOBIA
  • FOBIA ESPECÍFICA
  • FOBIA SOCIAL
  • TOC ( TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO)
  • TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO
  • TRASTORNO POR ESTRÉS AGUDO
  • TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA
  • TRASTORNO DEBIDO A ENFERMEDAD MÉDICA
  • TRASTORNO DE ANSIEDAD INDUCIDO POR SUSTANCIAS
  • TRASTORNO DE ANSIEDAD NO ESPECIFOCADO

(CRITERIOS DSM IV)

QUÉ ES LA ANSIEDAD

La ansiedad es un concepto muy empleado en psicología. Spielberger, Pollans y Worden definen la ansiedad como " una reacción emocional que consiste en sentimientos de tensión, aprensión, nerviosismo y preocupación , así como activación o descarga del sistema nervioso autónomo" . Asociamos la ansiedad a términos como miedo, angustia, estrés, pánico... Muchos de nosotros hemos experimentado alguno de estos estados en alguna época de nuestra vida, ya que la ansiedad es una respuesta adaptativa de nuestro organismo ante situaciones de peligro. Para afrontar una situación que percibimos como negativa el individuo debe activar su estado de alerta. Es una reacción normal que nos permite solucionar problemas específicos en situaciones concretas.
En cambio, cuando percibimos situaciones normales como peligrosas hablamos de ansiedad patológica. En lugar de cumplir su función natural , es decir, actuar como mecanismos de preparación y alerta frente a un peligro determinado, estos signos de activación emocional pierden su valor adaptativo y convierten algunas situaciones cotidianas en fuentes potenciales de terror y pánico. Los sentimientos que percibimos en el trastorno de ansiedad son desproporcionados y no tienen una justificación real. Su duración e intensidad se hacen insoportables.
Cuando los trastornos de ansiedad no son correctamente diagnosticados y tratados la calidad de vida del individuo se ve significativamente alterada en todos los ámbitos( personal, social,laboral y familiar). El mecanismo más frecuente para "intentar " hacer frente a este estado de malestar es la evitación. Se evita todo contacto con la situación de peligro percibida y se buscan situaciones percibidas como seguras ( no salir de casa, no subir en ascensor, no relacionarse con según que tipo de gente, no coger el avión...).

Afortunadamente el trastorno de ansiedad correctamente diagnosticado junto a una buena intervención terapéutica es uno de los trastornos que mejor y más rápidamente responden a tratamiento.